LARGOMETRAJE
70 min
Infantil, adolescente, familiar
Las gallinas se han adueñado de la ciudad.
La lluvia se ha unido a los caracoles.
Los pingüinos han invadido nuestras playas…
El mundo camina torcido, ésa es la opinión de Garbi. Por si eso fuera poco, y sin pretenderlo, ella, la gata que pretende ser dueña de la noche, se ha hecho amiga del perro Busti. La pareja Garbi-Busti, a través de diferencias y disputas, nos ofrece una interpretación irónica del mundo de los humanos, tan raros ellos, como si el binomio gata-perro fuese algo normal. Sus diálogos son el hilo conductor de las historias que se desarrollan entre las familias, sus hijas y el mundo. Una madre opina que hay que cortar la lluvia. Otra cree que su hija ya tiene edad para dejarse de tonterías, por ejemplo, tener vocación de bombera… Iholdi, Nora, Garazi, June son cuatro amigas en la adolescencia intentando que la realidad deje de ser tan racional para ser algo más humana. Defensoras de Martín, un chico diferente. Ecologistas haciendo frente a los pesticidas. Solidarias con Teandra y Luisinho en un incendio provocado. Esa vida que los padres ignoran las hace ciudadanas críticas y activas. El mundo puede caminar no tan torcido. Ese es el mensaje de nuestras adolescentes. Un parapente puede alzar aquella carabela abandonada en el muelle viejo y trasportarla a donde nace la utopía. Humor, crítica e intriga para una historia de solidaridad. Una historia llena de historias que va madurando a través de humanos y animales, tensiones y liberaciones.
Busti
Es el perro de June. Se zambulle en todos los pozos, riachuelos y corrientes. También en las fuentes públicas. No es muy limpio que se diga. Parece ser que los perros son así. Garbi, la reina nocturna, hace todo lo posible por domarlo. Inútil empeño. Y no quiere admitir que se ha enamorado de un sucio perro.
Teandra
Mujer grande. Y fuerte. Y la única que comprende a Luisinho. Y la única que intenta quitar la tristeza a Lulú. Y negra, muy negra. Y un tanto descarada con el resto de las mujeres. Y, sobre todo, de buen corazón.
Garazi
Qué alegría la suya cuando truena. También esta vive la realidad de otra manera: le encanta el “mal tiempo”. Su madre cree que hay que cortarle el cuello a la lluvia. Como suena. Y la convicción de Garazi es que sus padres no saben qué es la fiesta del agua, no saben bailar en medio del chaparrón, no saben meter los pies en los charcos. Su perro se llama Busti, otro elemento. Garazi y Busti “No están sanos de la cabeza”.
Garbi
Se pasea por los tejados tan elegante como si fuera la dueña de la noche. Salta como un tigre de balcón a balcón. Es muy limpia, pero no se arrima al agua. Dicen que los gatos y las gatas son así. Una noche, casi sin darse cuenta, Garbi entabla conversación con un perro. Gran cambio en su vida.
Luisinho
Un hombrecillo. Trabajador que sabe ganarse la vida con esto o con lo otro. Amigo de la cuadrilla de chavalas. Más amigo de Teandra. Bonito contraste. ¿Será verdad que llegaron huyendo de la Amazonia en ese barco abandonado en el muelle?
June
Vive en “La Casa de los Raros”. Así denomina June a los que viven bajo su mismo tejado. Ese hombre calvo usa peluca amarilla. El joven del último piso hace cruasanes todas las noches. Su amiga Alazne siempre tiene la jaula abierta. Su abuela no hace mas que coser y coser. Poco a poco, June pone en duda su normalidad. “Si todo me parece raro, puede que la rara sea yo…”.
Marko
Es un pequeño pingüino. Desde que ha nacido un hermano se siente arrinconado. El león marino le hace saber que el corazón de una madre no tiene espacio para querer a dos pingüinos. Y Marco huye de la Antártida a Europa, proclama enfadado “Mi madre no me quiere” a todo el mundo. Porque ahora su madre le canta al pequeño Lucas la canción que era suya, y solo suya.
Mokotxiki
¿Qué hace este pájaro entre los hipopótamos? ¡Si él lo supiera! Se esfuerza pero no puede, no puede rugir como los hipopótamos. Decide volver a una tierra sin hipopótamos. Ahora tiene que encontrar a alguien que entienda su débil cantar. ¡Incluso dentro de la jaula!
Martín
Se traga trozos de fresa por la nariz, inventa nuevas galaxias en la pizarra, llena las paredes de hermosos dibujos… Es diferente, sí, nuestro Martín. Osea, que para algunas chicas es mucho más interesante que los otros chicos. Y eso les resulta inaceptable a los guapos de la clase.
Lulú
Despreciada por las demás gallinas. Incluso le riñen porque come maíz como ellas aunque no trabaje. Porque esta es Lulú, la gallina que pierde color y no pone huevos. Menos mal que Teandra la proteje. Sus plumas vuelven a tomar color. E inesperadamente, se ha puesto a incubar. Pero no sobre un huevo.
Nora
Tiene un tío en Nueva York. Él le trajo este juguete, el camión que a veces saca a pasear. Porque quiere ser bombera. Su madre no puede soportarlo, le parece una niñería. Al menos es lo que dice. Pero en el fondo, lo que su madre quiere es que Nora sea ingeniera o pediatra. Lo tiene difícil, es terca. Poca niñería con esa chica. Trece años que tiene Nora: “¡Los padres no se dan cuenta de nada!”.
Migeltxo
Niño de tres-cuatro años. Hermano de Iholdi. Buen oído y buena memoria para todo lo que se habla a su alrededor. Le gusta intervenir en las conversaciones de los adultos. Inventa palabras. Le gusta ensuciarse en charcos y lodazales, como al perro Busti.Y atrapar gusanos.
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